No te parecerá nada nuevo si te decimos que el calcio y la vitamina D son amigos inseparables de los huesos. Tampoco te sorprenderá si afirmamos que el tabaco, el alcohol, la falta de ejercicio físico y llevar una vida sedentaria dañan tu salud.
Pero puede que sí te sorprenda saber que existen muchos hábitos aparentemente inocentes que te están perjudicando. Pero antes, si tienes una infección en los huesos medicarte con la dosis de cefalexina adecuada para ti, te ayudará a combatirla sin complicaciones.
Ahora si quieres evitarlos, sigue leyendo para evitar dañar más tus huesos del cuerpo:
Crujir los dedos
Reconozcámoslo, sabemos que crujir los dedos no es bueno para los huesos del cuerpo, pero como todo vicio, resulta difícil dejarlo. Si lo haces, debes saber que la repetición de este movimiento favorece la aparición de artrosis.
Evitar el sol por completo
Los rayos del sol te permiten obtener la dosis de vitamina D necesaria para fortalecer los huesos. Tómalo con precaución y hazlo durante 20 minutos al día. No esperes a exponerte al sol en verano, sino que debes hacerlo durante todo el año.
Por lo tanto, unas vacaciones a la playa con tu bebé o familia, siempre serán bienvenidas y beneficiosas para el cuerpo.
Los zapatos ajustados
Llevar un zapato demasiado ajustado, además de ocasionarte molestias, puede dañar los huesos y tus pies. Para evitarlo, cómprate zapatos cómodos y mejor que sean de cuero, con talón de caucho y punta ancha.
Los tacones altos
El tacón ideal es aquel que no supera los 3 cm ni tampoco es más bajo. Si utilizas tacones altos, obligas al cuerpo a desplazarse hacia delante y haces que los dedos y el antepié soporten todo el peso. En mujeres que llevan tacón muy alto son frecuentes los dolores en rodillas y columna.
Cinturón muy apretado
En personas con kilos de más, el cinturón puede comprimir la zona lumbar y acabar dando molestias que lleguen a la cadera. En estos casos lo mejor es llevar tirantes.
Descansar y no hacer nada
Sabemos que cuando llega el fin de semana la necesidad de descansar es vital. Para evitar que tus huesos del cuerpo se resientan, lo mejor es no parar en seco, sino hacer actividades y ejercicios diferentes que consigan distraerte de la rutina.
Pasar de cero a 100
Es fatal pasar de una inactividad deportiva durante la semana a una actividad desenfrenada sábados y domingos. Lo mejor es que dosifiques el ejercicio durante toda la semana, así evitarás posibles molestias y lesiones.
Exponerte a corrientes frías
Si sufres problemas de cervicales, evita situarte cerca de corrientes de aire, porque pueden incrementar aún más esta dolencia.
Cuando estés en reposo o sentada en una silla, intenta no encoger los hombros. Siempre que puedas mantén la espalda recta, el cuello alineado y los hombros relajados.
Correr sobre asfalto
¿Te va el running? Es un deporte fantástico, muy completo y barato. Eso sí, practícalo siempre sobre superficies intermedias.
Lo ideal es en el parque, sobre tierra, en lugar de hacerlo sobre asfalto o en la arena de la playa. De esta manera evitarás que tus cartílagos se resientan y sufrir lesiones en los huesos del cuerpo.
¿Sorprendida? Nosotros también no pudimos creer que cosas tan simples puedes dañar los huesos del cuerpo. ¡Ahora lo sabes! Procura cuidar más tus acciones, te lo agradecerás en un futuro.